miércoles, 22 de marzo de 2017

La Dama y la Muerte


Agerontes, inicia esta entrada con un tema que  iremos tratando en diversos momentos: la muerte, procesos de duelo y acompañamiento hasta el final de la vida.

En esta ocasión presento un video corto, narrado sólo en imagenes y con sentido del humor, quizás para que miremos hacia la muerte de una forma más llevadera, más digna, más serena...?









Si yo expresara lo que he sentido, sería:



DEJENME MORIR EN PAZ!!!!,

 POR FAVOR!!!!



lunes, 20 de marzo de 2017

Historia y Arte de la Vejez



La vejez es un espejo de nuestro futuro,
pero también de nuestro presente.




Mi interés en este post, es "averiguar, curiosear, reflexionar, disfrutar, aprender", acerca de "¿Cómo la historia y el arte, han visto, han reaccionado, han tratado a las personas mayores, a los viejos, viejas, ancianos, personas de la 3ª o 4ª edad?..."                   


                                            
                                                    Cabeza de anciano,  Rubens, 1655



Fíjense cuántos vocablos acabo de citar... sólo por eso, ya cabe ver, que la cosa es compleja, porque hablamos de un proceso en el tiempo... Hablamos de recorrido, de variaciones, de cambios en un largo tiempo.



Así que espero que este pequeño recorrido por la Historia  y por el Arte  -¿cómo se representó en la pintura, escultura  literatura a -la persona anciana, vieja?-..., les guste como a mí.


El escriba, anciano Ptah-Hotep




El texto más antiguo conocido de un viejo autoanalizándose, que se conoce, se trata de un escriba egipcio, Ptah-Hotep, visir del faraón Tzezi de la dinastía V, (redactado hacia el año 2450 antes de J.C.), en el que dice:


"¡Qué penoso es el fin de un viejo! Se va debilitando cada día; su vista disminuye, sus oídos se vuelven sordos; su fuerza declina, su corazón ya no descansa; su boca se vuelve silenciosa y no habla. Sus facultades intelectuales disminuyen y le resulta imposible acordarse hoy de lo que sucedió ayer. Todos los huesos están doloridos. Las ocupaciones a las que se abandonaba no hace mucho con placer, sólo las realiza con dificultad, y el sentido del gusto desaparece. La vejez es la peor de las desgracias que puede afligir a un hombre!".

¿Verdad que sorprende que se diga lo mismo que ocurre ahora, pero en el año 2450 antes de Jesucristo?




I-Período de gloria para los ancianos: las culturas primitivas.


Los ancianos prehistóricos no dejaron constancia de su quehacer o reflexión como tal en su vejez. Pero sí sabemos que como "culturas ágrafas": (aquellas que desconocen la escritura y por lo tanto, la cultura se transmite por la voz), se deduce que las personas longevas eran consideradas las sabias, que transmitían los ritos, las normas, costumbres de sus vidas. Bruj@s y chamanes eran personas mayores  La vejez representaba la sabiduría, el archivo histórico de la comunidad.



II- Los viejos en el mundo griego.


Conocemos que en el mundo griego, el ideal de persona era, "la belleza", sobre todo en el físico. Con lo cual, deducimos que las personas ancianas en este período no lo tuvieron muy bien, y menos, de las mujeres ancianas. Sin embargo, no fue todo negativo del todo. Platón relaciona la vejez feliz a la virtud, cuando dice en la República: "Pero aquél que nada tiene que reprocharse abriga siempre una dulce esperanza, bienhechora, nodriza de la vejez".
Platón: (Atenas, c.427-347 ac)






Tenemos un movimiento pendular, o una de "cal y otra de arena": así en la literatura griega, la posición de los ancianos, debemos considerarla muy desmedrada, dice Minois: -Vejez maldita y patética de las tragedias, vejez ridícula y repulsiva de las comedias; vejez ambigua y contradictoria de los filósofos. Estos últimos han reflexionado sobre el misterio del envejecimiento-.   El reverso lo constituye, que es en Grecia, donde se crean por primera vez, instituciones de caridad preocupadas por el cuidado de los ancianos necesitados.



Esparta, que aborrecía lo cómodo y agradable, su política, estaba regida por una Gerusía (senado compuesto por 28 miembros, todos, de más de sesenta años).

Atenas fue diferente, los ancianos fueron perdiendo poder desde la época arcaica. 
Durante el período helenístico, los viejos robustos y ambiciosos, tuvieron más oportunidades que en la Grecia clásica. Fue una sociedad más abierta y menos prejuiciosa con la edad.



III-El mundo hebreo: del patriarca al anciano caduco.



Los ancianos en esta cultura ocuparon un lugar privilegiado.


Los doctores de la ley Judaica:




En su período de nomadismo, encontramos en el Libro de los Números la descripción de la creación del Consejo de Ancianos como una iniciativa Divina:
"Entonces dijo Yahvé a Moises: elígeme a 70 varones de los que tú sabes que son ancianos del pueblo y de sus principales, y tráelos a las puertas del tabernáculo... para que te ayuden a llevar tu carga y no la lleves tu sólo" (Nm 11, 16, 17)"  .


Los ancianos están entonces investidos de una misión sagrada, portadores de un espíritu divino. En cada ciudad, el Consejo de Ancianos es todopoderoso y sus poderes religiosos y judiciales incontrarrestables.  Pero con el tiempo cambió y ya después de la muerte de Salomón, su hijo, Roboam, mantiene una actitud contraria y desecha la opinión de los ancianos. La imagen de los viejos comienza su declive, y se lee en el Salmo 71, el temor "a la vejez", dice: -No me rechaces al tiempo de la vejez; cuando me faltan las fuerzas, no me abandones-".


Se puede concluir que el anciano en la cultura hebrea ocupó un lugar relativamente importante basado en la dignidad que se le otorgaba en la Torá, aunque también pasó por momentos de declive.



IV- El mundo romano. Auge y decadencia.



El Imperio romano fue extenso geográficamente y largo en el tiempo. Diversas cualidades humanas, fueron la causa de tal empresa: su tolerancia, ductilidad y su sentido práctico.



Así al anciano se le dedicó mucha atención y se plantearon los problemas de la vejez desde casi todos los aspectos: políticos, sociales, psicológicos, demográficos y médicos.  



El mundo político de Roma se dirimía en el senado, (la palabra "senado", procede de "senex" (anciano) y éste era un verdadero consejo de ancianos:







Domicio Ulpiano (170-228 D.C.) elaboró una regla para el cálculo de las pensiones alimentarias. Asimismo se establece que existe un mayor número de ancianos varones que de mujeres, la causa seguro era por la muerte post-partos de las mismas. Las consecuencias de este perfil demográfico no dejó de manifestarse en matrimonios frecuentes de viejos con muchachas jovenes.



El Derecho romano, tipificó la figura judicial del "paterfamilias", que concedió al anciano un poder que llegó a ser tiránico, pues era un poder vitalicio y de autoridad ilimitada. Con el tiempo llegó a su límite y a su pérdida de poder. La "materfamília", tenía un papel secundario, aunque gozaba de la simpatía de la família. Pero la mujer sola y vieja fue brutalmente desdeñada.



La época de la República, fue la época de Oro para los ancianos.



                                Retrato de anciano, El Fayum
                               


A partir del siglo I de nuestra era se produce un giro inestable y cambian los valores tradicionales. Augusto inicia una época floreciente en las artes y la economía pero empieza la declinación del Senado y por consiguiente el poder de los ancianos menguó y sufrieron desprecio por los propios rigores de la vejez. No obstante, esta cultura mantuvo la dignidad de los ancianos. Se criticaba a los individuos, pero no al período de vida. 




V-Edad Media: época de contrastes.


El primer cristianismo, a pesar de su espíritu de paz, no fue muy amistoso con la vejez. Los primeros autores fueron duros con ella, pues lo simbolizaron con el pecado.

Sin embargo la excepción, fue San Gregorio Magno.




No obstante, la iglesia desde sus inicios se preocupaba por los desheredados y pobres, entre los cuales, los ancianos abundaban. A partir del siglo III, los hospitales cristianos, empezaron a ocuparse de ellos.  A partir del siglo V en el que se produjo la caída del Imperio Romano, las invasiones bárbaras acecharon por toda la Europa conocida. es toda una época de guerras, invasiones y podemos deducir que los ancianos no fueron muy buenamente tratados y toda la Alta Edad Media (siglos IX-XI), los ancian@s estaban sujetos a la solidaridad familiar, y en el ámbito eclesiástico, época de las construcciones de los monasterios, éstos serían las semillas, de lo que con el tiempo llegarían a ser los hospicios.

La Baja Edad Media, entre los siglos XI a XIII tuvo un florecimiento económico y una estabilidad social La esperanza de vida, llegaba a los 60-70 años. Los ancianos tenían responsabilidad en negocios. 





Sin embargo entre los siglos XIV y XV, la peste y las epidemias hicieron menguar la población sobretodo entre niños y jóvenes. La peste negra, en un período de 3 años se cobró un tercio de toda la población de Europa, y no excluyamos la muerte a la hoguera por parte de los fanáticos religiosos; todos estos acontecimientos llegaron a desestabilizar  la economía, la política y la demografía.



Por ello, es muy frecuente ver, este tipo de relaciones:





Matrimonios de mujeres jóvenes con personas mayores, ancianos.



En resumen, todas estas vicisitudes favorecieron que aumentara la posición social, política y económica de los ancianos.





VI-El Renacimiento o el combate contra los viejos.



El Renacimiento se inspira y busca la belleza en todo y en todas las personas. Buscó en el ideal de Grecia, Roma, el humanismo y la belleza. Así que todo lo que fuera feo, viejo o deforme lo repudió. Tanto en hombres ancianos como en mujeres ancianas. 



Aunque hay excepciones en pintura:



                               Anciano con su nieto, Doménico Ghirlandaio






                                                       Retrato de la madre, del pintor Albert Durero 

El arquetipo humano del Renacimiento lo personificaron los cortesanos y los humanistas. Ambos rechazaron a los viejos, pues representaba todo aquello que querían suprimir.

Un ligero cambio de menor violencia hacia el siglo XVI y en adelante, permite avanzar en la edad, incluída a las mujeres, pues se va avanzando también en mejoras de higiene en los partos.

En el arte, un "modelo inapropiado" de la vejez: -la vieja que quiere hacerse moza-

  estilo Barroco, del pintor Bernardo Strozzi




Desde el Arte, el primer período que va a contemplar la vejez desde una mirada naturalista será el Barroco. Aquí contemplamos la serena belleza de una mujer, con sus arrugas:


                      Rostro de mujer anciana, del austríaco Christian Seybold 1695-1768)




                            cabeza de anciano, Anton van Dyck




  Autorretrato de Sofonisba, pintora 1610





La vieja usurera, de José de Ribera




                             


                       Anciana dormida, Nicolas de Maes (discípulo de Rembrandt)




VII-El mundo moderno. El viejo frente a la burocracia.


Antes de la Revolución Francesa, (1789), el poder se asentaba en los reyes y sus famílias, así como en el círculo próximo a la nobleza.




                        Dos viejos comiendo sopaGoya, 1819, aprox.


A partir de la R.Francesa y de las Revoluciones Liberales que se fueron dando en Europa y América, se produce un cambio. El poder se traslada al Estado; nace también un nuevo estamento o clase social: -los burócratas-, que se encuentran en la clase social de la burguesía ésta irá tomando las riendas de los poderes políticos. Este sector, llamado burócratas, se le llamará el Terciario, mientras que el sector primario, serán los campesinos y artesanos, así como el sector secundario, pasarán a ser los obreros surgidos de la Revolución Industrial.



Anciano,        rostro pintado al óleo


En arte, la pintura del siglo XIX, pasa a ser moralizante o sentimental. Idealizando la vida. Aquí pareja de ancianos que ha llegado a la vejez juntos, o cómo deben cuidar los niños a los mayores, o un abuelo con su nieta.


                                 Senectud,    de Edmond van Hove



Ahora, el Estado es más impersonal y el poder se hace representativo, el pueblo puede elegir.
Este sistema tiende a una "despersonalización", tanto en los obreros como en los campesinos. Y la clase social más pobre, tanto hombres y mujeres sobretodo ancianos, serán los más desprotegidos.

 
                            El sastre del pueblo,   Albert Anker





                      El abuelo y su nieta,  John Everett Millais




En 1796, Tom Pains, hablaba de una "jubilación", es decir, de un dinero entregado, como una recompensa que se daba a partir de los 50 años después de haber trabajado para poder sobrevivir hasta su muerte. En los Paises Bajos, en 1844, a los funcionarios públicos se les daban pensiones. En Francia a los primeros que se les dió fue también a los funcionarios públicos y militares, luego a los mineros y a profesiones peligrosas.  Desde un punto de vista económico se pasó de una gratificación benevolente a un derecho adquirido.




        Viejo desnudo al Sol,    Mariano Fortuny, 1871








   Anciano afligido,   V.Van Gogh, 1891








                                       Anciana con rosario,  P. Cezanne
                                                


                                                  

IX. El mundo contemporáneo: violento, caótico y en búsqueda


                              La Celestina,   de  Picasso


En el mundo actual, entre el s. XX y siglo XXI, los nuevos avances de la medicina y la farmacología, han aumentado la longevidad  en las personas. Hoy podríamos hablar de una 4ª edad y hasta una 5ª, las personas que van llegando ya a los 100 años y pasan de ella. Tras la 2ª GM, la mayoría de países europeos podía contar con un "estado de bienestar", unas pensiones aseguradas, un sistema de salud garantizada que hoy por hoy, siglo XXI, empiezan a alejarse del horizonte, por lo menos en Europa.


                                   Anciana,    David Hocney





                                  La madre del pintor, Shaun Downey, con 89 años y enferma


Actualmente, todavía tenemos unas pensiones, unas garantías sociales en España y Europa, adquiridas gracias a muchas luchas sociales en el pasado. Así como instituciones (residencias, centros de día, servicios a domicilio), donde las personas mayores pueden o deben asistir, ya sea por voluntad propia o enfermedad. Y toda una serie de actividades, lúdicas, y para su salud física, emocional, mental y su bienestar en general.

Sin embargo, la crisis actual no sólo económica, sino de valores fundamentales, se resquebraja y estamos en el final de una sociedad que sólo mide/medía, la felicidad si había seguridad ecónomica y por lo tanto "aumento de productividad y dinero": capitalismo salvaje; 


                       De Andrew Wyeth




                              Homeless, (Anciano, sin techo)Ernesto Bieler







Por propia supervivencia necesitamos enfocarnos más en el "SER", que en el tener. La base de la felicidad, está en la abundancia interior, en una colectividad, en un individuo que se satisface con lo que necesita y esta necesidad no pasa por agredir al otro, o agredir a la naturaleza para tener una vida asegurada. Se basa en una mirada unitaria, ecológica, holística y respetuosa.

La desmedida idea o valor de "ser siempre jóvenes", casi "inmortales", "ideas", que también fomenta  "este mercado económico imperialista" o egoísta,  está fuera de la realidad, porque hace que se nieguen "los propios y reales aspectos físicos y psíquicos de la vejez: el rostro con arrugas, los pechos caídos, la piel fláccida; el menguar de estatura, el paso lento al caminar, -es decir-, las pérdidas físicas, orgánicas, de memoria,  y hasta la propia muerte final.


                        Autorretrato de Konstantin Somov



                           Autorretrato de Lucien Freud




                                   de Terry Rodgers


Y esta negación del propio y natural proceso de la vida, nos trae, la soledad, el vacío interior, la tristeza, enfermedades que en esa "propia vuelta" perversa, de la medicina actual, acompañada de una abusadora empresa farmacéutica, nos da remedio con las "pastillas" o la "medicación" y vemos personas ancianas en sus domicilios o residencias, tomando "cócteles" de "pastillas", para devolverles la salud o alargarles la vida, que paradójicamente suelen sentir la inutilidad de ella, y suelen expresarte, "para qué es necesario vivir tanto"?



                                            Papa's Tea, de Morgan Weistling, 1964


Todavía hay ancianos, que viven sólos en sus casas; la vejez nos lleva a mirar: el duelo exterior, pero nos invita, a volver la mirada hacia el interior para cultivarlo, para enriquecernos interiormente y lo irradiemos hacia afuera, y ofrecerles, devolverles


Es tiempo de "valorar", la abundancia interior en equilibrio con la exterior.



Madre de Lucian Freud, con Alzheimer.







Júlia Carrillo





De Andrew Wyeth







En las sociedades o culturas orientales, tienen una mirada diferente hacia el anciano, aunque, actualmente culturas como China, empiezan a tener cambios. 

Dice -Alícia Labrador-, en su blog (1): "Los ancianos de los países orientales tienen una posición diferente a la de los países occidentales.Son una figura respetada y admirada por toda la família, pilares de la sociedad. En Japón, están muy involucrados en la vida social, es normal, ver a ancianos controlando el tráfico o velando por la seguridad de los ciudadanos, sin retribución económica a cambio. Son figuras respetadas. En la cultura India, los ancianos y el respeto a ellos es importante, se tiene en cuenta su experiencia. Y en China, la família siempre ha sido un pilar en la sociedad ".

Aunque ahora empieza a disgregarse ésta, y van apareciendo más ancianos sólos. Es un problema que China está empezando a tener.



                                anciano chino fumando, (mitad. s.XX) (óleo)




Este escrito parte de mi propia mirada, de mi propio espejo hacia mi vejez y a la de los demás. Cuando trabajo con "ell@s", deseo que cuando sea vieja, me traten a mí con este cariño y respeto, como intento ofrecer. Seré en ese futuro, no lo sé, un@ de tant@s que tendremos alguna ¿pensión económica?, alguna enfermedad que dependa de terceros?...no lo sé, lo único que sé es que este caos, esta crisis, nos está llevando a reflexionar más profundamente, ...¿qué es lo que no hago bien o en positivo como individuo y como colectivo y en el planeta tierra,  para mi presente y para mi vejez?

Nuevos caminos se presentan en mi caminar a diario, y me digo a mí misma, que:  -la vejez es el espejo de mi futuro pero también de mi presente-.